Casos de uso y aplicaciones para el MACHINE LEARNING

    En los últimos años, hemos oído hablar de muchos avances en el campo de la inteligencia artificial. El número de aplicaciones de la IA también ha aumentado. De hecho, la mayoría de los avances en este campo están directamente relacionados con el aprendizaje automático.

El aprendizaje automático está en el corazón de muchos servicios modernos populares. Por ejemplo, los sistemas de recomendación de Netflix, YouTube y Spotify utilizan esta tecnología.

Lo mismo ocurre con los motores de búsqueda como Google o Baidu, los módulos de noticias de las redes sociales como Facebook y Twitter, o los asistentes de voz como Siri y Alexa. Por todas estas razones, el aprendizaje automático puede considerarse un símbolo de la innovación a principios del siglo XXI.

Por eso, estas plataformas y otros gigantes de Internet recopilan enormes cantidades de datos personales de los usuarios: qué películas te gustan, en qué enlaces haces clic, a qué mensajes respondes, etc. Todos estos datos pueden servir de fuente para un algoritmo de aprendizaje automático que pueda predecir lo que se desea.

El aprendizaje automático también permite que los robots aspiradores se limpien solos, que su correo electrónico detecte el correo basura y que los sistemas de imagen médica detecten tumores de forma más eficiente. Los vehículos autónomos también utilizan el aprendizaje automático.

Los asistentes digitales como Apple Siri, Amazon Alexa o Google Assistant se basan en la tecnología de Procesamiento del Lenguaje Natural (PLN). Se trata de una aplicación de ML que permite a los ordenadores procesar datos de voz o de texto para "entender" el lenguaje humano. Esta tecnología también se utiliza para la voz GPS, los chatbots y el software de texto a voz.

A medida que el big data siga creciendo, generando cada vez más datos, y que la tecnología informática siga avanzando, el aprendizaje automático ofrecerá aún más oportunidades. 

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